Desde sanar traumas hasta transformar vidas, la ayahuasca es una puerta al autodescubrimiento y la expansión de la conciencia. Descubre cómo esta planta puede redefinir tu identidad, liberarte de la negatividad y conectar contigo mismo y los demás.
Estamos aquí para afirmar la legitimidad de prácticas culturales y religiosas bien establecidas y para defender los derechos de las poblaciones tradicionales, las instituciones religiosas de buena fe y las minorías sociales. La regulación de la ayahuasca y el reconocimiento de los grupos de ayahuasca no son solo logros deseables, sino necesarios.
Existen tasas más altas de trauma para las personas de color y LGBTQI, y las mujeres son más propensas que los hombres a experimentar TEPT, depresión y ansiedad. Si consideramos a los psicodélicos como tratamiento para los síntomas de salud mental, tiene sentido centrarse especialmente en estos grupos.
A medida que aumenta la popularidad de la ayahuasca en todo el mundo, también aumentan de manera alarmante los incidentes de abuso sexual de mujeres.
Un uso temprano de los psicodélicos por parte de los psicólogos fueron los intentos de tratar a los homosexuales para cambiar su orientación sexual.